19 de abril de 2009

Reflexiones en el Día de la Convivencia en la Diversidad Cultural

“La cultura, en su rica diversidad, posee un valor intrínseco tanto para el desarrollo como para la cohesión social y la paz”.
UNESCO

Hoy en el Día de la Convivencia en la Diversidad Cultural, estaría bueno preguntarnos cuál es el concepto de diversidad cultural y analizar si vivimos o no en una sociedad en que se integran a las diversas culturas.
La Unesco sostiene que “la diversidad cultural se manifiesta en la originalidad y la pluralidad de las identidades que caracterizan los grupos y las sociedades que componen la humanidad. Fuente de intercambios, de innovación y de creatividad, la diversidad cultural es, para el género humano, tan necesaria como la diversidad biológica para los organismos vivos.”
De esta manera, hablar de diversidad cultural, significa hablar de diversidad en la estructura social, manifestada a través de las prácticas que caracterizan a una determinada sociedad humana: el lenguaje, las creencias religiosas, el arte, la música, las prácticas de trabajo de la tierra y la selección de los cultivos, la dieta, entre otras cosas. Asimismo, al interior de una sociedad también existen diferencias culturales propias, como por ejemplo las diferencia entre sexos, edades, tradiciones de los grupos profesionales y sociales.
De todas maneras, hay que tener en cuenta que la pluralidad también despierta el temor a perder la identidad propia y estimula la invención de tradiciones autóctonas en que apoyar y legitimar ese sentimiento de diferencia de cada cultura.
La Comisión Mundial de Cultura y Desarrollo considera que, por un lado, la diversidad es un elemento esencial de nuestra naciente "cultura cívica" mundial que requiere de una nueva convivencia cultural a nivel mundial. Por otro lado, considera que la diversidad es una fuente capital de energía social para los distintos países, por lo que solicitó que se instauren políticas culturales en las que se contemple la diversidad étnica, así como la pluralidad de idiomas, ideologías y modos de vida. Aunque la Comisión reconoció que puede haber muchas formas distintas de tomar ese camino, también dijo que "el modo más duradero de hacerlo es crear un sentido de nación como comunidad cívica, arraigada en valores" compartidos por todos los elementos de la sociedad nacional.

El Prodiversitas,Programa Panamericano de Defensa y Desarrollo de la Diversidad biológica, cultural y social, tiene como objetivo “ser una puerta hacia una mayor comprensión de los unos y de los otros en la composición de un NOSOTROS pleno, en la diversidad de identidades”. En una de sus notas de análisis desarrollan el concepto de cultura desde distintas perspectivas: cultura material, cultura como saber tradicional, cultura como instituciones y organización social, cultura como visión del mundo y cultura como prácticas comunicativas. En este última los analistas sociales sostienen que las categorías lingüísticas y culturales no siempre son significativas para la autopercepción de los individuos como pertenecientes a un grupo social determinado. En Latinoamérica las identidades étnicas no necesariamente coinciden con la variación cultural o lingüística, ya que encontramos grupos étnicos dentro de un mismo grupo lingüístico (como los mayas y yaquis en el norte de México) o un solo grupo étnico con lenguas distintas (como los popolucas hablantes de zoque o mixe en el Golfo de México). Esta situación se acentúa si tomamos en cuenta la discrepancia entre los términos nativos para autodenominarse y los nombres que les han sido impuestos por las sociedades nacionales.
Prodiversitas asegura en una de sus notas que algunos Estados han abordado estas cuestiones aplicando políticas decididamente multiculturales, en tanto que otros se adhieren a una actitud explícitamente asimilacionista, que no dejan lugar, o apenas permiten, el mantenimiento de prácticas culturales diferenciadas.

“La diversidad cultural es una fuerza motriz del desarrollo, no sólo en lo que respecta al crecimiento económico, sino como medio de tener una vida intelectual, afectiva, moral y espiritual más enriquecedora. Esta diversidad es un componente indispensable para reducir la pobreza y alcanzar la meta del desarrollo sostenible, gracias, entre otros, al dispositivo normativo, hoy día ya completo, elaborado en el ámbito cultural”, sostiene la UNESCO. En el informe su Informe Mundial sobre la Diversidad Cultural , hicieron un balance sobre todo lo que se dice, piensa y hace en nombre de la diversidad cultural, así como identificar las condiciones necesarias para que la diversidad se vuelva una ventaja y no una amenaza, una fuente de renovación para las políticas públicas al servicio del desarrollo, de la cohesión y de la paz.

Nos encontramos en un contexto en que la economía y la cultura alcanzaron una dimensión mundial. A veces creo que esta realidad nos conduce a la conciencia de una heterogeneidad y otras, en cambio, pienso que solo promueve una homogeneización descomunal. ¿Por qué digo esto? Porque a veces pareciera que aceptamos las diferencias culturales y en otros momentos discriminamos a quienes no se asemejan a nuestros hábitos y costumbres.

En días de conmemoración como el de hoy, muchos de nosotros tendríamos que replantearnos estas cuestiones y pensar que hay alguien, además de nosotros, con derecho a ser respetado.

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